El piloto francés Sébastien Loeb, nueve veces campeón del World Rally Championship, correrá la próxima edición del rally Dakar con el equipo Peugeot, formando un cuarteto de miedo con Carlos Sainz, Stephane Peterhansel y Cyril Despres

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Loeb de 41 años añadirá una nueva disciplina dentro del mundo del motor, tras los nueve campeonatos del mundo de rallyes con el equipo Pegueot Sport, al que vuelve después de conseguir la victoria en la subida al Pikes Peak.

El reto ahora será mucho más complicado: nada más que pelear por el triunfo en el raid más duro del mundo.

    
"El Dakar es completamente diferente de todo lo que he corrido hasta ahora", reconoce el francés. "Será largo y duro competir durante dos semanas, necesitas saber cuidarte tú y el coche durante quince días. Es otra faceta del automovilismo que voy a descubrir a partir de enero", añadió.

Loeb explicó que tiene mucho que aprender ya que será la primera ocasión que compita con "un coche de motor diesel" y en una disciplina diferente a lo que ha estado haciendo hasta ahora, ya que en este tipo de rallys, el piloto tiene "que encontrar una ruta propia".

"El rally de Marruecos me dará una interesante idea de lo que es esta disciplina, así que es una fantástica oportunidad para aprender, sobre todo junto a mis exitosos compañeros", prosiguió Loeb.

En Marruecos también participará Carlos Sainz que declaró que el piloto francés es "una referencia dentro del mundo del automovilismo", aunque en esta ocasión "será una nueva aventura para él, de la que está perfectamente capacitado para adaptarse sin ningún problema", aseguró.

Junto al nueve veces campeón del mundo de rallys estará Daniel Elena, copiloto de Loeb en Citröen, que vivirá, al igual que su compañero, su primera experiencia en el Dakar.

Junto a Loeb y Sainz, la escuadra del equipo Peugeot la completarán el también francés, Stephane Peterhansel, ganador en once ocasiones del Dakar, el piloto más premiado de la historia en esta carrera, y su compatriota Cyril Despres, vencedor cinco veces del Dakar en motos, y que el año pasado dio el paso a los coches.