Si hablamos de deporte rey, en lo que a fierros compete, la F-1 está claramente en ese lugar, es el equivalente a la carrera espacial en el mundo automotriz. Y lo defino así porque es el laboratorio de las nuevas tecnologías que serán incluidas en los automóviles “normales” tiempo después. 

Para este año 2017, se vienen una serie de “cambios” en las normativas de los monoplazas, y buena parte de ella no son inventos o innovaciones, sino meramente una vuelta a un pasado no muy distante, ya que el aspecto nos recordará a los F1 noventeros. ¿Y todo para qué?  lo usual, para hacer superlativo el espectáculo. Es que el “rugir” de motores, el tomar las curvas a velocidad increíble y el pasar frente a la marquesina en lapsos muy pequeños son la base de este gran espectáculo. 

En el esquema al costado están descritos los cambios para mejorar la competencia, la que promete disminuir de 4 a 6 segundos por vuelta, gracias a un mejor paso por curva de entre 20 y 50 km/h. Intentaré explicar cómo cada uno de ellos hará su aporte:

Imagen 1: En el caso de los neumáticos, se aumentó su ancho en los 4, logrando un 25% más de superficie, ¿en qué aporta?; tenemos más superficie de contacto con el piso, y eso es una ganancia de agarre. El caucho de los neumáticos provee de roce contra la pista, y es este roce lo que permite el avance, ya que es el equivalente de empujarse contra una pared o la salida de Usain Bolt de su zapato contra el taco de largada. Vale decir el que el neumático sea de material blando permite la tercera ley de Newton, acción y reacción, además de una superficie de agarre que dificulta los derrapes. 

Imagen 2 y 3: El alerón trasero está más bajo, y con un grado de inclinación mayor, conjuntamente con un difusor más ancho, la ganancia de carga aerodinámica aumenta un 35%. ¿Qué es la carga aerodinámica?, es una buena pregunta. No solo los neumáticos se encargan de tener pegado el monoplaza al piso, a las velocidades que estos circulan, bien podría tener pequeños “despegues”, el alerón trasero funciona a la inversa de un ala de avión, haciendo que el aire que pasa por encima sea más lento, generando mayor presión que el de abajo, presionando de esta forma al auto contra el piso.

Algo parecido ocurre con la punta, que se ensancha y se le da forma de punta de flecha, al ser más ancha ganamos carga aerodinámica o pegado al piso, y la punta de flecha proporciona mejor entrada aerodinámica y calentamiento más rápido de los neumáticos. En este punto también mencionaré el hecho de que la base del monoplaza es plana, con algunos canales de circulación, esto genera un efecto de “ala de avión invertida” en el vehículo entero, con succión por debajo, producto de la baja presión del aire que al generarse un Venturi, circula muy rápido.  

Por último los deflectores laterales, también conocidos como bargeboards aumentan su tamaño, el fin de esto es generar mayor carga aerodinámica, ya mencionada antes, y menor resistencia aerodinámica, ya que rompe la desviación del flujo circundante en el vehículo, creando menor turbulencia detrás, evitando de esta forma un lastre en la parte posterior. También aportan mejor aire para la refrigeración, ya que guían parte del flujo hacia los postones.

Tan impactante es la física aerodinámica de un F1, que si alcanzan suficiente velocidad, la carga es tan grande, que podría circular por el techo de un túnel, si este fuera plano y muy largo, sin ninguna ayuda más que la propia velocidad.